Desde que asumió en diciembre de 2023, el presidente Javier Milei ha encabezado una profunda transformación en la economía argentina, en un contexto en el que, según datos oficiales, se proyecta un crecimiento del Producto Bruto Interno (PIB) del 5% para 2025, acompañado de una estabilización inflacionaria que apunta a una tasa anual de 18,3% y a un dólar oficial que se ubicará en torno a los 1.207 pesos. Estas cifras forman parte de la hoja de ruta anunciada en el proyecto de Presupuesto 2025, cuyo eje central es el superávit fiscal –con un superávit primario estimado en el 1,3% del PIB una vez pagados los intereses de la deuda externa– y la implementación de un estricto control del gasto público.
La política de austeridad emprendida por el Gobierno ha permitido además frenar la emisión monetaria y, en consecuencia, contribuir a la reducción de la inflación en términos mensuales. En enero de 2025 se registró un incremento del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de apenas 2,2%, cifra que marca el mínimo mensual de casi cinco años, lo que evidencia una clara tendencia bajista en un contexto de reformas estructurales profundas.
En el ámbito social, el Ministerio de Capital Humano ha desempeñado un rol decisivo en la reducción de la pobreza. Según datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la tasa de pobreza, que alcanzó niveles cercanos al 38,9% en el tercer trimestre de 2024, se proyecta que disminuya a alrededor del 33,5% durante el primer trimestre de 2025. Esta mejora se atribuye a políticas de inclusión laboral y capacitación, que han favorecido la reinserción de miles de ciudadanos en el mercado laboral, al tiempo que se han simplificado y focalizado los programas de asistencia social.
Por otra parte, en materia de seguridad, el Ministerio de Seguridad, encabezado por la ministra Patricia Bullrich, ha implementado estrategias integrales de prevención y control del delito que, según cifras publicadas por la Oficina Nacional de Estadísticas Criminales, han logrado una reducción del 15% en la tasa de delitos registrados durante el primer semestre de 2025, en comparación con el mismo período del año anterior. Además, las encuestas de percepción ciudadana indican que la aprobación respecto a las políticas de seguridad se ha incrementado, pasando de un 42% a un 65%, lo que refleja una mayor confianza de la población en las instituciones encargadas de proteger su integridad.
Estos avances se enmarcan en un proyecto de reformas que, a lo largo de 123 años de evolución económica, ha permitido a Argentina superar ciclos de crisis profundas y transformarse en un país con mayor estabilidad fiscal y monetaria. La combinación de un ajuste riguroso en el gasto público, el fortalecimiento del superávit fiscal y las medidas de desregulación han restablecido la confianza de inversores nacionales e internacionales, impulsando además un proceso de modernización en sectores clave como la industria, el comercio y, especialmente, la agricultura, que tras años de dificultades se ha recuperado con un crecimiento espectacular en el último trimestre de 2024.
La coordinación entre las políticas económicas, sociales y de seguridad ha logrado no solo mejorar los indicadores macroeconómicos, sino también incidir positivamente en la calidad de vida de la población. Con un crecimiento proyectado del 5% para 2025, el país aspira a consolidar un marco de estabilidad que permita recuperar, a largo plazo, el nivel de ingresos y el bienestar social alcanzados en épocas anteriores. En este sentido, la apuesta por una economía de “déficit cero” y la implementación de medidas de austeridad han sido determinantes para poner fin a décadas de desequilibrios fiscales.
En definitiva, la gestión de Milei ha generado cambios palpables: la economía se fortalece con un crecimiento real y sostenido, la inflación se reduce a niveles que permiten la planificación a mediano plazo, y la población percibe mejoras significativas en términos de empleo y seguridad. Estos resultados, respaldados por cifras oficiales y verificables, ofrecen una nueva perspectiva para Argentina, un país que, tras 123 años de altibajos, parece haber encontrado un camino hacia la estabilidad y el progreso.